En la última orden, en enero de este mismo año, se decía a los periodistas que el contenido debía primero volcarse en los teletipos. La guía especifica, además, que los mensajes en la red social “no deben redactarse de tal forma que parezca que se están emitiendo opiniones personales sobre los temas del día”.
La guía añade, además, que “un retweet sin comentario propio puede ser visto como un signo de aprobación de lo que se está transmitiendo”. Se agrega una nota sobre la seguridad del personal de AP, de tal forma que los periodistas no pueden publicar en los medios sociales ninguna información que pueda poner en peligro a otros compañeros, como el paradero de los redactores que trabajan en lugares potencialmente peligrosos o informes sobre la detención de miembros del personal.
Un ejecutivo de la compañía aseguró al portal Journalism que políticas de empresa como estas fueron “violadas” cuando miembros del personal fueron detenidos en las protestas de Wall Street.
Una nueva directriz de AP ordena también a los periodistas interactuar con los políticos en las redes sociales.